¿Qué es la melatonina?
La melatonina es una hormona producida por la glándula pineal en el cerebro. Su función principal es regular los ritmos circadianos, es decir, el ciclo natural de sueño y vigilia. La producción de melatonina aumenta al anochecer, lo que prepara al cuerpo para descansar.
Cómo funciona en el organismo
La melatonina actúa como un “reloj biológico”. Cuando la luz disminuye, el cerebro produce más melatonina, facilitando el sueño. Durante el día, sus niveles descienden, ayudando a mantenernos despiertos y activos. Además de regular el sueño, también participa en procesos metabólicos, inmunológicos y antioxidantes.
Beneficios de la melatonina
- Mejora la calidad del sueño: facilita conciliarlo y mantenerlo estable.
- Alivio del jet lag: ayuda a ajustar el reloj interno tras viajes largos.
- Recuperación deportiva: algunos estudios sugieren que mejora la recuperación muscular gracias a su acción antioxidante.
- Salud ocular: investigaciones indican posibles efectos protectores sobre la retina.
- Función antioxidante: combate radicales libres, contribuyendo al bienestar general.
Efectos secundarios y precauciones
La melatonina se considera segura a corto plazo, pero en algunas personas puede causar:
- Somnolencia excesiva.
- Dolores de cabeza.
- Mareos.
- Sueños intensos o vívidos.
Precauciones importantes:
- No se recomienda su uso prolongado sin supervisión médica.
- Puede interactuar con medicamentos para la hipertensión, anticoagulantes o antidepresivos.
- Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben evitar su uso sin prescripción médica.
Cómo y cuándo tomarla
La dosis habitual oscila entre 1 y 3 mg, dependiendo de la persona y la recomendación médica.
- Se recomienda tomarla 30–60 minutos antes de acostarse.
- Para el jet lag, puede tomarse en los días posteriores al viaje, siempre siguiendo las indicaciones médicas.
Quién puede beneficiarse más
- Personas con insomnio ocasional o dificultad para conciliar el sueño.
- Viajeros frecuentes que sufren jet lag.
- Deportistas con entrenamientos o competiciones en horarios nocturnos.
Conclusión
La melatonina no es un “remedio milagroso”, pero sí una herramienta eficaz para mejorar el descanso cuando se usa de manera adecuada. Consultar siempre con un médico o nutricionista antes de iniciar su consumo es la mejor forma de garantizar un uso seguro.